A los ocho años se dio inicio en el mundo de la interpretación, leyendo cuentos infantiles en la emisora Caracol Televisión.
Al cumplir 19 años, Julio regresó a Bogotá con la meta de seguir la carrera artística.
Mientras que le llamaban para hacer teatro, se dedicó a la elaboración de forros navideños para acetatos.
Tras regresar a Colombia, cinco años después, concretamente en 1979, inició la actuación en su país con Cuento del domingo.
Tras varias interpretaciones, consiguió su primer protagónico con Hato Canaguay como Pancho Zapata, papel que le abrió muchas oportunidades.