Ludopatía
Si bien el sistema DSM (III, III-R y IV1) y la CIE-10 incluye este trastorno entre las alteraciones debidas a un bajo control de los impulsos, lo cierto es que los criterios diagnósticos operativos DSM tienen exactamente el mismo diseño que el de las adicciones a sustancias, lo que muestra la concepción subyacente para la enfermedad en ese sistema: se trata de un problema adictivo "sin sustancia" incluido en un apartado diferente al suyo.Puede afectar la vida diaria del adicto, de tal forma que la familia, el sexo o incluso la alimentación pasa a ser algo secundario.Por ello, no se le debe de confundir con un vicio, ya que la ludopatía es una grave enfermedad crónica, una adicción.Se ha observado que los jóvenes con alta impulsividad tienden a estar en mayor riesgo de desarrollar adicción al juego, ya que la impulsividad puede predisponer a conductas apresuradas e improvisadas relacionadas con el mismo.Por ello es mucho más probable que pierdan dinero en la ruleta, blackjack, craps, póquer, apuestas deportivas o en una máquina tragamonedas, en el que los ciclos terminan rápido y existe una constante tentación de jugar una y otra vez o aumentar las apuestas, en oposición a las loterías nacionales, en las que el jugador debe esperar hasta el próximo sorteo para ver los resultados.[16] En Colombia, el psiquiatra Pablo Rodríguez afirma que la ludopatía puede destruir a una persona tanto como el alcoholismo y la drogadicción.Relató muchos casos en que personas perdieron hogares, automóviles, empresas, además de los familiares y amigos.A veces, en los casos extremos, se requiere que el paciente sea internado y medicado.En la mayoría de los casos funcionan los tratamientos ambulatorios, las consultas semanales, las reuniones con Jugadores Anónimos, el afecto pero también la firmeza: la familia no debe pagarle las deudas a un ludópata.En México podría haber entre uno y tres millones de personas adictas al juego.Aunque en Perú no existen datos certeros para graficar la dimensión del problema, todo indica que tiende a crecer.Sin embargo, no se considera que ninguno de estos tratamientos sea el más eficaz, y no se ha aprobado ninguna medicación por parte de la FDA para el tratamiento del juego patológico.Se ha visto que un enfoque, la terapia cognitivo-conductual reduce los síntomas y las urgencias relacionadas con el juego.[27] Además, para pacientes que sufren la comorbididad del trastorno bipolar y el juego patológico, la administración continuada de litio se ha mostrado eficaz en ensayos preliminares.[28] El fármaco antagonista de los opiáceos conocido como malmefeno también ha resultado exitoso en los ensayos para el tratamiento del juego compulsivo.La familia también juega un papel importante en el tratamiento, antes de todo ayuda a construir la motivación del paciente, que no es en absoluto previsible.La terapia de grupo, en particular la terapia cognitivo-conductual, que se centra en identificar y cambiar patrones de pensamiento y comportamiento relacionados con el juego compulsivo, ha demostrado ser una herramienta efectiva para tratar la ludopatía en adolescentes.Por lo tanto, la terapia de grupo, en combinación con el seguimiento individual, es una estrategia comúnmente utilizada para tratar la ludopatía en adolescentes.Otras terapias populares actualmente entre los más jóvenes son aquellas que involucran a la familia en el proceso de recuperación, abordando dinámicas familiares disfuncionales y fortaleciendo el apoyo social.En resumen, la ludopatía puede tener efectos perjudiciales en el desarrollo de la juventud, pero con el tratamiento adecuado, que incluya terapias como la TCC, terapia familiar y apoyo grupal, es posible abordar esta adicción y promover un desarrollo saludable en los jóvenes afectados.Para zanjar la deuda, recurrirá a su hermano Miguel, quien le dará un dinero ganado por la venta de unas tierras del pueblo.Finalmente salda la deuda en el capítulo 139 pero, aun así, la relación con su mujer Mercedes queda afectada.