Los juegos electrónicos más conocidos son los videojuegos, pero también existen otros como los pinball,[1] las máquinas tragamonedas,[2] los audiojuegos,[3] ciertos juegos de tablero y varios juguetes.
En los videojuegos de texto, la interacción se desarrolla mediante texto; las pantallas mostraban texto en vez de gráficos rasterizados con píxeles.
[4] Los audiojuegos carecen de todo tipo de interfaz gráfica, y se basan en el uso del audio y el tacto.
Los juegos electrónicos portátiles, como el Tetris, el Simon, el Merlin y el Lights Out, usan pantallas de lamparitas o cristal líquido que son capaces de mostrar unos pocos elementos específicos al juego.
Los pinball y las máquinas tragamonedas, originalmente juegos mecánicos, evolucionaron en la década de 1970 hacia juegos electromecánicos o electrónicos para permitir incorporar elementos de juego más interesantes.