Eligió esta carrera -explica en una entrevista- porque en ella había un profesorado progresista, heterodoxo y abierto al pensamiento crítico.
[1] Fue en la misma Universidad de Rochester donde realizó el posgrado, obtuvo una maestría en 1968 y un doctorado en 1974.
[3][1] Walkowitz ha impulsado la innovación en la erudición histórica y defendido la presencia de mujeres historiadoras en las academias.
[8] Décadas después en su libro Nights Out: Life in Cosmopolitan London (2012) amplía su interés por la historia cultural y social de Londres hasta mediados del siglo XX.
[3] Llegó a la investigación sobre la prostitución, explica, explorando las alianzas en el siglo XIX de las feministas burguesas y las mujeres trabajadoras.
Considera que no se sabe si los crímenes fueron perpetrados por una o varias personas y ni siquiera si era un hombre.
[11] En La ciudad de las pasiones terribles (1995) la historiadora estadounidense profundiza en las dinámicas sociales y culturales a raíz de los asesinatos atribuidos a Jack el Destripador[11] Al igual que Walkowitz, Barjola no se ha centrado "en ver lo macabro de los actos del crimen sino cuáles son las dinámicas sociales y culturales que permitieron crear ese hito y a qué estaban respondiendo.