Perteneciente a la noble familia de los Rocabertí, inició su formación humanista en su propio lugar de nacimiento.En 1640 fue hecho prisionero por los franceses durante la Guerra de Cataluña, continuando sus estudios en el cautiverio (1642-1645).El 29 de abril de 1678 fue nombrado por Carlos II virrey y capitán general de Valencia, puesto en el que cesó al año siguiente, siendo nombrado por segunda vez en 1683.El 22 de junio de 1687 convocó y celebró Sínodo Diocesano, dictando 24 títulos ordenados a la mejor administración de las temporalidades eclesiásticas y al exacto cumplimiento de los decretos tridentinos referentes a la fe y costumbres.Apologeta del papado, en oposición al galicanismo y al protestantismo,[3] dejó escritas dos obras de temática teológica: