Lhévinne escribió un pequeño libro en 1924 que es considerado un clásico: Basic Principles in Pianoforte Playing.
Se graduó el primero de una clase en la que estaban, entre otros, Serguéi Rajmáninov y Aleksandr Skriabin, consiguiendo la Medalla de Oro para piano en 1892.
Los dos empezaron juntos a dar conciertos, práctica que duró hasta su muerte.
Apremiados por el antisemitismo y las turbulencias políticas de la época, se trasladaron a Berlín en 1907, donde Lhévinne se ganó reputación como uno de los principales virtuosos y profesores del momento.
Cuando pudieron abandonar Alemania, se marcharon en 1919 a Nueva York, donde Lhévinne continuó su carrera concertística y enseñó piano en la Escuela Juilliard.