Estos sucesos son conocidos como los Sanfermines de 1978 y están considerados uno de los episodios más violentos y conocidos de represión policial durante la Transición Española.
A raíz de este suceso, se convocó una huelga general de carácter político en el País Vasco y Navarra.
Se produjeron incidentes violentos en numerosas localidades de ambos territorios.
Durante un enfrentamiento entre la policía y los manifestantes en la confluencia de las calles San Bartolomé y la Cuesta de Aldapeta del Centro de la capital guipuzcoana, Barandiaran resultó mortalmente herido de bala en el pecho y falleció casi en el acto.
[1] Las investigaciones judiciales llevadas a cabo en los años posteriores demostraron que el disparo había partido de las filas de las Fuerzas de Orden Público, pero el caso Barandiaran fue sobreseído provisionalmente 7 años más tarde al no poder ser identificado el autor de los disparos que acabaron con la vida del joven.