En su país, ha cobrado notoriedad y relevancia a raíz de sus análisis sobre la relación cívico-militar existente en Chile,[8][9][10][11] tema que tuvo una considerable difusión en 2018 cuando fue entrevistado en televisión por Tomás Mosciatti para CNN Chile.
[1] En dicha casa de estudios se desempeñó como ayudante en la cátedra de Derecho administrativo, cuyo profesor titular era quien terminase siendo un gran amigo suyo en la vida: Enrique Silva Cimma,[1] también político del Partido Radical.
[1] En los años 60', Elizondo ingresó a militar en el Partido Comunista de Chile (PC), al que en esa época «se entraba por invitación».
Aquel papel, le permitiría volver a dicho país para ahora operar como un corresponsal de guerra.
En dicho organismo estuvo en constante contacto con el presidente Salvador Allende, quien le asignó procesar institucionalmente la estatización de la banca privada nacional.
[1] Asimismo, Elizondo agrega: En sus siguientes años en la RDA, es decir, entre 1974 y 1976, vivió estrictamente vigilado por la Stasi, al igual que toda la población de ese Estado.
Sin embargo, Elizondo pudo sortear esos obstáculos para así poder acceder a noticias del mundo occidental, las que estaban prohibidas y eran reemplazadas por la publicación de las directrices del partido único, el Partido Socialista Unificado de Alemania.
En su brindis me dijo algo enigmático, muy propio de su sutileza: “Yo no te habría dado permiso para irte”».
[1] Asimismo, mientras Elizondo se desempeñó como periodista en la revista Caretas y comentarista del Canal 9, su esposa –Maricruz– fue ejecutiva de la Escuela de Negocios ESAN, conjunción que les permitió una estabilidad mientras vivieron en dicho país.
[1] Su paso por este país principalmente estuvo remitido a las funciones que desempeñó en el centro de informaciones.
Retornada la democracia en su país, el presidente electo, Patricio Aylwin, designó como ministro de relaciones exteriores a Silva Cimma, quien también fue personalmente cercano a Aylwin durante sus años como profesor en la Universidad de Chile.
[1] Por otra parte, en 1993 pudo volver a dictar la cátedra de Relaciones Internacionales en su alma mater gracias a las gestiones de su amigo Jaime Williams, quien consiguió que el rector Mario Mosquera lo convocara para restituir su cátedra perdida.
[1] Años más tarde, Elizondo sería designado como embajador de Chile en Israel, país donde cultivó muy buenas relaciones con Shimón Peres, y donde también participó en negociaciones palestino-israelíes como agente internacional neutral, contexto en el que también coincidió con Yasser Arafat.
Asimismo, un último hito de importancia que experimentó en tal país fue la visita del Papa Juan Pablo II en el año 2000,[1] fecha en que finalizó sus funciones como embajador en ese país.