José Portugal Catacora

[1]​viajó a diferentes países fomentando el diálogo, alimentando el proyecto educativo nacional, considerado embajador del diálogo, postuló nuevas fórmulas de educación para la pedagogía peruana gracias a su profundo conocimiento del entorno quechua y aimara.Ingresó a la Escuela Normal anexa al Glorioso Colegio San Carlos (1928-1929), donde obtuvo el título como maestro, con un conjunto de maestros quienes fueron los primeros profesores que se formaron con una tendencia hacia lo indígena quechua y aimara, dicho por él mismo fue gracias la mentoría de Julián Palacios Ríos y Alfonso Terros Luna[3]​quienes le impartieron el respeto por la cultura y sabiduría de los pueblos.Para Jose Portugal Catacora, la educación debía estar centrada en el niño, que al pertenecer a un entorno rural e indígena maneja habilidades propias y diferentes al resto las cuales deben respetar de incentivarse, propuso que los niños debían iniciar su educación no en castellano, sino en su lengua materna quechua o aimara, propuso liberar a los niños de una educación autoritaria, coactiva, transmisora de información disciplinaria y rescatar la cultura indígena, difundirla y re valorarla.Otra de sus ideas era la educación en comunidad, el educador sostenía que todos los pueblos andinos ofrecen educación de manera informal la cual se reproducía en los cuentos y leyenda; la sociedad y comunidades educaban por obligación a los niños en algunas actividades, esta es una idea que diversos autores compartían por esos años lo cual permitió el desarrollo, a mediados del siglo XX del desarrollo de la escuela experimental bilingüe en las zonas rurales.[8]​ Ernesto More, en la presentación de "Danzas y Bailes del Altiplano" (1981), indicó que "Hacer conocer el folklore el valor del folklore a través de sus infinitas peculiaridades, es obra bella, humana y patriótica.