A menudo se le apoda el «Durruti valenciano».
Desde la revista y editorial Nosotros intentó reforzar a contracorriente el pensamiento anarquista, proyecto truncado por su detención y posterior ingreso en las prisiones secretas del SIM.
José Pellicer representa el espíritu de un anarquismo intransigente con los principios y de una profunda ética revolucionaria, contraria a la violencia vengativa y gratuita.
Pellicer se casó con Maruja Veloso, que en los años 30 del siglo XX fue una de las pocas mujeres matriculadas en Medicina en España, y era padre de la actriz, escritora y periodista Coral Pellicer.
Durante su estancia en la cárcel Modelo de Valencia, Pellicer le escribió a su hija el cuento titulado Tilín que relató a su hija antes de morir, aunque esta no encontró el manuscrito hasta dos décadas después de su fallecimiento.