José Luis Sánchez-Bravo Solla (Vigo, 1954 - 1975), miembro del Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP), antifranquista, al que se le aplicó la pena de muerte.
[1] Residente en Madrid, estudiaba Física y militaba también en la Oposición Sindical Obrera.
[2] En Hoyo de Manzanares los fusilamientos los hicieron tres pelotones compuestos cada uno por diez guardias civiles o policías, un sargento y un teniente, todos voluntarios.
No pudo asistir ningún familiar de los condenados, pese a ser "ejecución pública", según marcaba la ley.
Treinta y cinco años después, decide denunciar el caso de Sánchez Bravo y el suyo propio para exigir que se declare ilegal al tribunal que condenó a muerte a su marido.