[5] Tras el cierre de General Motors, continuó trabajando por su cuenta primeramente acompañado por Omar Wilke y luego en solitario, consiguiendo nuevos títulos dentro del TC.
[7] Nacido en 1941, la vida de Pedersoli se vio ligada al mundo automotor casi por accidente, ya que tras haber perdido a su padre a muy temprana edad, su madre le pediría buscarse alguna actividad por fuera del cursado de su escuela primaria.
Casualmente en ese entonces, al lado de su casa se encontraba un taller mecánico en el cual también se atendía el vehículo de Turismo Carretera del piloto Jorge Descotte.
Tomando como base la versión sedán de cuatro puertas, el equipo oficial se presentó en esa temporada con Néstor García Veiga y Mauricio García al volante de dos unidades similares.
[12] Tras haber cumplido con la tarea de presentar en forma satisfactoria las dos versiones del modelo Chevrolet Chevy para el equipo oficial de General Motors en el TC, en 1974 se produce una incorporación que dio pie a una nueva sociedad exitosa: la de Pedersoli y Roberto Mouras.
En esta oportunidad, Mouras alcanzó dos triunfos los cuales bastaron para dar pelea en el torneo y finalizar en la tercera colocación.
[13] Tras el cierre de General Motors en Argentina, Pedersoli continuó trabajando por su cuenta, junto a su inseparable socio Omar Wilke.
En este ámbito, la sociedad Espinosa-Pedersoli-Wilke volvió a la actividad logrando una seguidilla de tres podios y coronando el año con la victoria en la última fecha y la consecuente obtención del título.
Disconforme con el resultado de la reunión (el motor fue homologado, lo cual atentaba contra sus intereses), le propuso a su socio Omar Wilke una decisión que terminó por marcar una época: Poner en pista una unidad Dodge GTX.
Una vez más la sociedad Mouras-Pedersoli-Wilke volvió a demostrar su poderío al llevarse primeramente el petit torneo Lizeviche-Galíndez corrido en el segundo semestre de 1981 y conquistar sin apelaciones los campeonatos de 1983, 1984 y 1985, siendo a su vez, los tres únicos títulos que lograría Pedersoli como preparador de Dodge.
Sin embargo, en 1988 lograron repuntar y acercarse nuevamente a las posiciones de vanguardia, cerrando el torneo en un meritorio tercer lugar.
Sin embargo, cuando todo parecía encaminado a la conquista del título o a seguir en la incesante búsqueda del ansiado cetro, lamentablemente la tragedia terminó truncando los planes en 1992, cuando durante el desarrollo de la Vuelta de Lobos, válida por la penúltima fecha del campeonato, Roberto Mouras sufrió un violento accidente al impactar con su coche contra un talud de tierra, perdiendo la vida casi en forma instantánea.
El reingreso de Traverso se dio con el campeonato ya iniciado, contando primeramente con Pernigotte en la atención del chasis y más tarde, con Tulio Crespi en la misma función, siempre con Pedersoli a cargo de los motores.
Pero el puntapié inicial dado en el año 1995 fue doblemente exitoso, ya que en ambas categorías obtuvieron el campeonato, siempre con Traverso como piloto e instaurando un hecho histórico irrepetible: La conquista en simultáneo de los títulos de dos de las categorías más importantes del automovilismo argentino.
[19] [1] «Rojo 7000 Retro junto a Jorge Pedersoli nota año 1996 te cuenta TODO imperdible (entrevista biográfica)».