Los intentos de hacer la serie más oscura le hicieron chocar con el actor William Hartnell, que como el único miembro que quedaba del equipo original se veía a sí mismo como el guardian de los valores originales de la serie.
Con Hartnell cada vez en peor salud y hostil hacia Wiles, buscó una forma de reemplazarlo.
También quedó a disgusto con el largo serial The Daleks' Master Plan, que había sido preparado por el equipo de producción anterior y fue muy difícil de realizar.
Uno de los pocos cambios que hizo y se mantuvieron en el tiempo, si bien a largo plazo, fue el de limitar casi todas las historias a solo cuatro episodios.
El trabajo del siguiente productor, Innes Lloyd, coincidió con un cambio en los superiores, y así Lloyd pudo introducir un personaje con acento cockney (Ben Jackson) y reemplazar a Hartnell.