[1] La arruinada fortaleza, conocida como Jirbat Jiddin, fue habitada más tarde por la tribu beduina al-Suwaytat.
El castillo fue construido alrededor de dos torres o bergfried, con una muralla exterior.
[8] En 1283, Burcardo de Monte Sion describía un castillo arruinado en el emplazamiento que había pertenecido a los teutones.
[10] El territorio, a principios del siglo XVIII, pertenecía al jeque local Mahd al-Hussein.
La mezquita era un pequeño edificio cuadrado cubierto por cuatro bóvedas sostenidas por un pilar central.
[16][17]" Las ruinas fueron más tarde habitadas por beduinos de la tribu al-Suwaytat cuya ocupación principal era la ganadería.