Su padre, Víctor de la Serna, también era periodista y su abuela, Concha Espina, novelista.
En los años cincuenta comenzó a desempeñar la profesión de su padre.
En sus inicios, fue redactor jefe de la revista Teresa y del diario Pueblo.
Dos años más tarde, en 1981, fue nombrado subdirector del diario El País.
[5] En abril de 2013, le fue concedido el premio Ortega y Gasset a la «trayectoria profesional».