El jamón ibérico es un tipo de jamón serrano procedente del cerdo de raza ibérica, muy considerado en la gastronomía española y en la portuguesa (presunto ibérico), que se considera como un artículo de alta cocina y un manjar exquisito.
[2] La alimentación del cerdo es tan importante que este jamón se clasifica básicamente según la cantidad de bellota que haya consumido antes del sacrificio.
La carne tiene sabor delicado, poco salado o dulce y de aroma agradable.
Estas exigen y controlan que los jamones ibéricos cumplan unas determinadas características para poder llevar su sello de calidad.
Es interesante aclarar el significado de denominaciones comerciales que gracias al marketing son utilizadas frecuentemente, y de denominaciones populares ampliamente utilizadas, pese a su ambigüedad y que pueden llevar a cierta confusión: