Poco después de llegar al Flamengo fue reinventado como volante por izquierda, posición en la cual se consagraría.Fue también entrenador del club en varias ocasiones durante las décadas de 1940 y 1950, a veces fungiendo de jugador y entrenador al mismo tiempo.[2] También hizo de supervisor durante el segundo tricampeonato del club, en 1953, 1954 y 1955[nota 3].Disputó 15 partidos y metió un gol, contra Colombia en el Sudamericano de 1945.Después pasaría a fungir como mánager en el club, asumiendo interinamente el cargo de técnico en varias ocasiones.