El implante anticonceptivo de levonorgestrel —conocida originalmente como Norplant y actualmente como Jadelle— es un implante subdérmico de levonorgestrel utilizado como método anticonceptivo.
Fue creado por el chileno Horacio Bruno Croxatto y el estadounidense Sheldon Segal, entre 1966 y 1967,[1][2] quienes lo aplicaron por primera vez en 1974, en un centro clínico de Santiago de Chile,[1] y cuyos resultados permitieron que, en 1983, en Finlandia, fuera finalmente confirmada su fiabilidad y aprobada su comercialización.
[3] Desde entonces ha sido ampliamente usado en el mercado de anticonceptivos.
Los efectos secundarios comunes incluyen aumento de peso o perdida de peso, nerviosismo, ansiedad, náuseas, vómitos, mastalgia, mareos, dermatitis, hirsutismo, pérdida de cabello del cuero cabelludo, dolor de cabeza, depresión y erupción cutánea.
A veces, se producirá dolor, picazón, moretón o infección en el sitio del implante.