La medida más destacada al frente de este organismo fue el reconocimiento del fútbol femenino en 1970.
Dejó ambos cargos en 1972 para ocupar responsabilidades dentro de la UEFA, siendo reemplazado en el fútbol galo por Fernand Sastre.
[2] Aunque se valoró la suspensión del encuentro, la final terminó disputándose ese mismo día ante el riesgo de desórdenes públicos en Bruselas, una medida muy criticada.
[3][4] A raíz de este suceso, el organismo europeo tomó por primera vez medidas para estandarizar la seguridad en los estadios.
[8] En 1990 no quiso presentarse a la reelección como presidente de la UEFA, siendo sucedido por el sueco Lennart Johansson.