Inmatriculaciones en España

La inmatriculación es el proceso a través del cual se produce «el ingreso o acceso de una finca en la vida registral de los Libros del Registro, efectuado por una inscripción de dominio de la misma a favor del inmatriculante».[1]​ En este proceso se han realizado inmatriculaciones al amparo de sucesivas leyes, modificaciones y/o adaptaciones de las mismas, hasta la aprobación de la Ley 13/2015, de 24 de junio, de Reforma Hipotecaria que pone fin a la posibilidad de que la Iglesia Católica en España, inmatricule bienes con certificación diocesana.[2]​[nota 1]​ Durante el periodo comprendido entre 1998 y 2015 la Iglesia Católica en España ha inmatriculado diferentes inmuebles, suponiendo una masiva inscripción en el Registro de la Propiedad, resultando De ellas En la publicación sobre inmatriculaciones,[4]​ en sus partes I[2]​ y II,[5]​ se incluyen una serie de tablas, con distinto contenido, más o menos explícito, variando de una fuente, Obispado o Diócesis, u otro, pero no se dispone de identificación geográfica, catastral o registral.[nota 2]​ En páginas 25 a 29 de parte I de dicha publicación se encuentran una serie de cuadros o tablas resumen de las inmatriculaciones en España.[2]​