Los daneses establecieron además varios puestos comerciales, gobernados desde Tranquebar: En su apogeo la compañía danesa junto con la sueca importaron mayor cantidad de té que la misma compañía británica, llevando el 90% de este producto al Reino Británico, y generando así grandes ganancias.
Después de una pequeña caída, la compañía danesa perdió importancia rápidamente y fue disuelta en 1729.
[1] Durante las guerras napoleónicas, en el año 1801 y de nuevo en 1807, la marina británica atacó Copenhague.
Como consecuencia del último ataque, Dinamarca perdió su flota y la isla de Helgoland.
La única contramarca que se conoce contenía las letras “FR” (Frederik VI) entrelazadas y coronadas, al pie de las mismas aparece el número “VI” (numeral del rey).