El independentismo taiwanés es un movimiento político o corriente sociopolítica cuyo objetivo principal es la eliminación de los vínculos existentes entre la República de China y la República Popular China, así como la creación de un Estado independiente y soberano en la isla de Taiwán, bajo el nombre de República de Taiwán.
Este movimiento es apoyado por la Coalición Pan-verde y encuentra oposición en la Coalición Pan-azul, que está a favor de la reunificación pacífica con la China continental.
En el año 2000, se celebraron unas elecciones en las que resultó vencedor Chen Shui-bian, líder del Partido Progresista Democrático, una formación constituida por varios partidos favorables a la independencia formal de la isla.
Lee acabaría abandonando el Kuomintang y fundando el 24 de julio de 2001 su propio partido, de ideología marcadamente independentista: la Unión Solidaria de Taiwán, integrado en la Coalición Pan-Verde.
Debido a la demanda de soberanía sobre Taiwán y las pretensiones territoriales de la República Popular China, una declaración de independencia formal podría dirigir a un enfrentamiento militar entre las fuerzas armadas de la República de China y el Ejército Popular de Liberación, que se intensificaría y supondría la intervención de otros países, como los Estados Unidos o Japón.