Al final del recorrido, todos los manifestantes se han unido en el amplio bulevar en frente de la sede presidencial.
En la avenida que desemboca en el Palacio Presidencial, los organizadores han colocado dos símbolos de la protesta: una gigantesca bola blanca inscrita con la palabra «Peace» («Paz» en inglés) y un gran erizo rojo con púas que representan los 706 misiles chinos ubicados a pocos kilómetros de la isla.
La Policía militar ha movilizado a 500 agentes, vestidos con ropa de calle, para proteger al presidente, según fuentes oficiales.
Otras muchas personas llevaban cintas en la cabeza en las que podía leerse «Democracia, paz, proteged Taiwán».
Tanto el presidente taiwanés, Chen Shui-bian, como el primer ministro, Frank Hsieh, han participado en la marcha aunque a título personal.