Se sitúa en la confluencia de las calles Ronda y Cruz, en pleno Casco Viejo bilbaíno.Tres años más tarde el albañil Francisco de Elorriaga empezó a trabajar en las cubiertas, bóvedas y cúpula.Los laterales son muy sencillos, con dos ventanas adinteladas superpuestas para los tramos posteriores de las capillas bajas y las tribunas.La cara norte del templo es ciega al llevar adosado por ese lado el claustro de San Andrés, antigua dependencia colegial hoy desvinculado de la iglesia, ya que desde 1921 forma parte del Museo Arqueológico, Etnográfico e Histórico Vasco.De nuevo, la inspiración en el Gesù, esta vez en la parte estructural diseñada por Jacopo Vignola, salta a la vista.La planta resultante es rectangular, con la cruz que forman la nave y el corto transepto (cuya profundidad no supera la de las capillas laterales) inscrita en el mismo.