Iglesia de San Pedro (Arcos de la Frontera)

En su interior conserva la solemne armonía del gótico original, sin que desentone la nutrida presencia de elementos renacentistas y sobre todo barrocos con los que más tarde se completa.

La puerta de acceso está flanqueada por doble columna pareada y doble hornacina en los intercolumnios, superpuestos y con imágenes, conjunto sobre el que corre un fuerte entablamento en cuyo centro se sitúa una imagen del titular, San Pedro, sobre ménsula, en hueco adintelado.

Correspondiente a los cánones del gótico, su ábside es profundo y poligonal, con siete lados o lienzos, sin ornamentación ni ventanas; e interiormente lo ocupa un gran retablo, Las capillas primeras de ambos lados de la nave forman como un crucero y se terminan en la primera mitad del siglo XVII.

A los pies de la iglesia y frente al presbiterio se alza el coro barroco del siglo XVIII, cerrado en su frente con artística reja y facistol en el centro.

Alrededor se dispone una valiosa sillería realizada en caoba, cedro y ébano, con relieves que representan a santos y escenas de la pasión de Cristo.

Vista exterior de la iglesia de San Pedro.
Retablo del alta mayor de la iglesia de San Pedro.
Detalle del campanario.