Se encuentra ubicada en la isla de Riddarholmen, próxima al Palacio Real en Estocolmo, Suecia.
La mayor parte de los monarcas suecos desde Gustavo II Adolfo a Gustavo V se encuentran enterrados aquí, además de monarcas anteriores, como Magnus Ladulås y Carlos VIII Knutsson.
Faltan unos pocos, como la reina Cristina, convertida al catolicismo y enterrada en la Basílica de San Pedro de la Ciudad del Vaticano.
Después de la reforma protestante, el monasterio fue clausurado y el edificio cambió a iglesia de culto protestante.
La mayor parte de la iglesia pertenece al estilo Gótico y fue edificada en ladrillo rojo; no obstante, varias de las capillas funerarias, que sobresalen del cuerpo del edificio notablemente, fueron realizadas en otros estilos arquitectónicos y materiales como mármol de Carrara.