Catedral anglicana de San Pablo (Valparaíso)
La prohibición del culto público de religiones distintas a la católica, dificultaba enormemente el poder realizar servicios religiosos normales y tener las instalaciones adecuadas para las personas de otras religiones, que llamaban disidentes.[4] Los británicos habitaban principalmente en los cerros Alegre y Concepción, y gracias a su poder económico unido al paulatino aumento de la tolerancia tanto entre la población como entre las autoridades, en 1857 el cónsul William Rouse se decidió a organizar colectas con el fin de reunir dinero para comprar terrenos y construir una iglesia anglicana allí.[4] Pero de todas maneras la construcción del templo comenzado por los ingleses provocó una polémica alentada por el rechazo que la iniciativa despertaba en algunos grupos católicos.[5] El diseño del templo, que quedó terminado en 1858, es del arquitecto e ingeniero inglés William Lloyd, quien llegó a Chile contratado para construir el ferrocarril de Valparaíso a Santiago.[4] Los vitrales del templo fueron importados desde el Reino Unido; dos placas conmemoran a los porteños de origen británico que murieron en la Primera Guerra Mundial.