Se estableció en Sevilla, donde entabló amistad con el príncipe Al-Mu'támid, que también era poeta.
Ibn Hamdís continuó trasladándose por los países islámicos del Mediterráneo hasta su muerte en Mallorca en 1133.
Muchas qasidah están dedicadas a la Sicilia perdida de su juventud.
Del diwan de Ibn Hamdís existen al menos dos copias manuscritas, custodiadas una en la Biblioteca Vaticana y otra en San Petersburgo.
La obra fue descubierta durante el siglo XIX por el arabista siciliano Michele Amari.