Yballa

Otros lo relacionan con el término tuareg bella o ibella aplicado entre las tribus bereberes a los esclavos que viven libremente sin ser horros.

[1]​[2]​[4]​[3]​[7]​ Debido a su belleza atrajo la atención de Hernán Peraza, quien la tomó como amante.

Sin embargo, en base al denominado «pacto de Guahedun» que había forjado Peraza con los jefes cantonales de la isla, ambos se habían convertido en «hermanos».

[1]​[2]​[4]​[3]​[5]​[8]​ Estando Peraza con Yballa en la cueva habitación de la joven, es atacado por los gomeros rebeldes.

La tradición histórica conservó la frase que en lengua aborigen dirigió Yballa a Peraza en este momento: Ajeliles juxaques aventamares, y que es traducida como 'Huye, éstos vienen por ti'.