Su origen se encuentra en los bosques primitivos, principalmente de los períodos Carbonífero y Pérmico (final del Paleozoico), durante los que se dieron las condiciones ambientales adecuadas para desarrollar grandes extensiones boscosas.
Se utiliza principalmente para la generación de energía eléctrica.
[2] El carbón térmico ideal se enciende fácilmente pero tiene un alto contenido calórico.
[3] La hulla se utiliza para la producción de carbón activado.
También se han investigado procesos químicos para activar el coque producido a partir de la hulla.