Este último murió en 956, dejando un hijo menor, el futuro Hugo Capeto, y Hugo II aprovechó para emanciparse de esa soberanía, como Fulco el Bueno, conde de Anjou, y de Teobaldo el Tramposo, conde de Blois.
[1] Después de eso, se alió con el hijo de Teobaldo, Eudes I, en una coalición contra el capeto.
Sigefroy, obispo de Le Mans, fiel a Hugo Capeto debió huir de la villa y refugiarse junto al conde de Vendôme Bucardo I el Venerable a quien le dio los dominios que formaron el Bas-Vendômois.
Aún vivía alrededor del año 980, murió antes de 992.
[2] No se conoce quién era su esposa.