Remedios "Reme" Martín (Lina Morgan) es una mujer de pueblo de edad indeterminada -ella dice tener taytantos- que llega a Madrid junto a su padre Paciano (Rafael Alonso) y su gallina Cristal (en referencia a la protagonista de Cristal) para hospedarse en un hostal regentado por su tía Asunción (Mary Begoña).
Allí convivirá con su prima Elena (Mónica Pont), la prostituta Sonsoles "Sonsy" (Ana Obregón), la mujer Filomena "Filo" (Tote García Ortega), las solteronas Casta (Marta Puig) y Virginia (Julia Martínez) de Jimeno y con el apuesto Luis (Joaquín Kremel), del que se enamorará perdidamente.
Pero también se hospedaron los maduros enamorados Menchu (María José Alfonso) y Obdulio (Fernando Delgado), el pijo e inocente Junior (Pedro Rollán) y la exconvicta Juncal (Lolita Flores).
La serie, grabada con presencia de público, tiene una estética teatral con escenarios fijos.
Esta forma de hacer reír había probado su eficacia en los éxitos teatrales Vaya par de gemelas o Sí al amor, que trazaron unos esquemas reutilizados en la serie.