Es un servicio que se presta por entidades con sucursales físicas o aquellas que sólo operan a distancia de forma virtual (por Internet o por teléfono), como los neobancos.
Aunque inicialmente solo servía como medio de consulta, en la actualidad incorpora prácticamente todos los servicios del sistema financiero (Usuarios, 2002; Muñoz Leiva, 2008: 42).
UU., de la mano del “Security First National Bank” (SFNB) (Gandy, 1995; Teo y Tan, 200) … En la lucha por atribuir un nombre adecuado a dicha innovación tecnológica, aparecen términos como 'banca virtual', 'banca en línea', e-banking o genéricamente 'banca electrónica', aunque conviene aclarar qué se entiende por cada una de ellos (Clasificación de banca electrónica de Muñoz Leiva, 2008: 43): En este movimiento (en este cambio de conducta) del consumidor, al pasar desde la banca tradicional basada en oficinas a un banca autónoma, los inversores particulares han sufrido un profundo cambio en su relación con las instituciones financieras.
Desde el punto de vista del consumidor, la banca en línea ofrece una serie de ventajas que permiten crear valor: No obstante se ha detectado un conjunto de obstáculos o inconvenientes que inhiben la óptima adopción de la banca online (Muñoz Leiva, 2008: 59): Normalmente se opera registrándose con los datos del cliente y una clave o un certificado digital.
Otras medidas de seguridad son: España: Otros países: