Además, la flauta, junto al violín y la guitarra, había jugado un rol importante en los inicios del tango de la 'Guardia vieja'.
Todo el movimiento da una sensación bailable, y para esto fue compuesto en compás binario, como los tangos tradicionales de esa época.
En todo el movimiento se le pide a los intérpretes que realicen acentos fuertes y débiles, como suele ocurrir en el tango.
La partitura tiene indicaciones de accelerando y rallentando, así como secciones ad libitum, para darle cierta libertad a los intérpretes.
[2] En el tercer movimiento se hace alusión a una nueva transformación del tango, aquí fusionado con la bossa nova brasileña.
Una tercera sección retoma el Tempo I (rápido), introduciendo técnicas de ejecución contemporánea en la flauta, como interpretar sin una afinación definida, efectos percutidos con las llaves, armónicos y otros ataques.
Este movimiento se aleja de la tonalidad, por lo que posee una melodía cromática, también tiene acentos desplazados y un estilo jazzístico en la flauta.