Johann Friedrich Herbart

Allí estableció y dirigió un seminario de pedagogía hasta 1833, año en que volvió a Gotinga, lugar en el que permaneció como profesor de filosofía hasta su muerte.

Fue un excelente pedagogo, que destacó por sus grandes aportes a la educación especial, luchó por la reforma liberal y desencadenó una de las más grandes controversias sobre aprendizaje empírico, buscó no solo explorar los problemas educativos desde una perspectiva teórica sino con apoyo de la experiencia.

Sus tres divisiones primarias están determinadas como formas distintivas de elaboración.

Se le puede considerar un filósofo relativista optimista y científico.

Cree que no hay ideas innatas pero sí una capacidad humana (moral).