Otra especie del género es H. muris, que afecta a las ratas de laboratorio.
Las lesiones se originan después de la reproducción intestinal del parásito y su difusión vía linfática o hemática al bazo, ganglios linfáticos, médula ósea, pulmones, hígado o músculos, donde continúa su desarrollo.
No existe un tratamiento eficaz para eliminar al parásito.
Se han utilizado al dipropionato de imidocarb y la doxiciclina, un antibiótico del grupo de las tetraciclinas, sin conseguir eliminarlo, por lo que la única manera de evitar la enfermedad es la prevención del contacto entre garrapatas y el perro.
No existe todavía un fármaco específico para este tipo de patología.