Guy Gilles

Tras estudiar Bellas Artes, se mudó a París, donde trabajó como ayudante de François Reichenbach en 1964.

Su primer largometraje, L'Amour à la mer (1962), estaba interpretado por Juliette Greco, Romy Schneider y Jean-Pierre Léaud.

Su relación romántica con Jeanne Moreau parece haber inspirado la película Absences répétées, galardonada con el Premio Jean Vigo en 1973, y en la cual la actriz interpreta la canción.

Hélène Martin le pidió rodar un documental sobre Jean Genet, Saint, poète et martyr.

Fue estrenado en un festival de cine gay organizado por Lionel Soukaz en 1978, siendo la cinta atacada por un grupo fascista que hirió al director.