Guillermo Bianchi
La historia la relata Gonzalo Figueroa Yáñez en su libro Memorias de mis últimos 200 años.[9] En 1945 fue nombrado cónsul general en México y, dos años más tarde, encargado de negocios en Costa Rica.Su primer libro publicado fue El cura sentimental, recopilación de 22 relatos aparecida en 1918.[12] Al año siguiente, la Compañía de Pedro Sienna estrena Pecado de juventud, pieza "que para la época fue un escándalo", según afirma Mario Cánepa en su Historia del teatro chileno.La peruana Chela Higginson, a quien conoció siendo cónsul general en Lima, lo acompañaría durante toda su larga enfermedad.