En 1989 el entonces príncipe voló como voluntario para el "African Medical Research and Education Foundation" (AMREF) en Kenia y en 1991 trabajó como piloto durante un mes para el Kenya Wildlife Service.
La elección de su esposa, como ha sido habitual en las últimas décadas en la familia real neerlandesa, causó cierta controversia.
En razón de la polémica causada, Jorge Zorreguieta decidió no acudir a la boda real cuando representantes del primer ministro neerlandés, Wim Kok, le pidieron que no asistiera.
En el momento de ascender, ha sido el primer monarca varón en 123 años en los Países Bajos.
Su primer año estuvo marcado por lo que el periódico De Volkskrant llamó una "Silenciosa revolución palaciega para modernizar la Casa Real".
Sin embargo, la reina Juliana había vendido los palacios reales y muchos bienes culturales (pinturas, antigüedades, libros, etc.) en subastas no personales.
Desde el año 2006 la reina y su familia ya no estaban incluidos en la lista de Forbes.
Entre las propiedades personales de la reina había varias fincas, casas y acciones.
Actualmente los palacios reales son propiedad del Estado neerlandés y se permite su uso al monarca reinante.
Las pinturas, objetos históricos y joyas pertenecientes a la Casa de Orange normalmente están sujetos al uso en acontecimientos protocolares y son considerados objetos de interés cultural.
La fundación también custodia los objetos utilizados en ocasiones ceremoniales, como carruajes, mesa de plata y utillaje diverso.
Los gastos oficiales se realizan en el desarrollo de actos y deberes oficiales y en ellos se incluyen los gastos de los ministros más relevantes que acompañan al monarca en esos actos.