La situación era tensa y se empezaron a formar milicias que velaban por los intereses de uno u otro grupo.
Mientras tanto se formó la Malaita Eagle Force (MEF) para defender los intereses de los malaitanos.
El gobierno no tuvo más remedio que pedir ayuda al Secretario General de la Commonwealth.
[3] El 30 de junio, el Parlamento eligió por un estrecho margen a Manasseh Sogavare como nuevo primer ministro.
Sogovare creó la Coalición por la Unión Nacional, la Reconciliación y la Paz, que dispuso un programa de acciones para intentar resolver el problema étnico, mejorar la economía y distribuir los beneficios del desarrollo más equitativamente.
El anuncio se efectuó mediante el envío de un fax firmado al primer ministro Allan Kemakeza.
Australia fue el país que más efectivos aportó, conociéndose su contribución como Operación Ánodo, aunque otros países del Pacífico Sur también aportaron efectivos, como Nueva Zelanda, Fiyi y Papúa Nueva Guinea entre otros.
El corazón comercial de Honiara quedó prácticamente reducido a escombros y cenizas.
Tres miembros del Parlamento Nacional, Charles Dausabea, Nelson Ne'e y Patrick Vahoe, fueron arrestados durante o como resultado de los disturbios.
El país que más contribuyó fue Australia, seguida de Fiyi y Nueva Zelanda.