Según un artículo del Elders' Journal – un periódico Santo de los Últimos Días publicado en Far West – "Los santos aquí están en perfecta paz con todos los habitantes de los alrededores, y la persecución ni siquiera se menciona entre ellos...".
A los ojos de muchos ciudadanos no mormones, estos asentamientos eran una violación del compromiso.
Probablemente unas ciento cincuenta familias no mormonas vivieran en Daviess con asentamientos en Millport, Grindstone Fork y la capital del condado, Gallatin (LeSueur, p. 59).
Más tarde recordó que los problemas empezaron cuando los Santos de los Últimos Días "empezaron a formar un asentamiento en el Condado de Daviess, lo cual, bajo su acuerdo, no tenían derecho a hacer" (Saint's Herald p. 28:230).
Cuando llegó el día de las elecciones, Peniston hizo un discurso en Gallatin diciendo que si los misurianos "permitían a hombres como estos [los mormones] votar, pronto perderían su sufragio" (LeSueur, p. 61).
Cuando unos treinta Santos de los Últimos Días se acercaron al centro electoral, un misuriano llamado Dick Weldon declaró que en el Condado de Clay los mormones no tenían permitido el votar "no más que los negros".
Algunos mormones intentaron contener a Brown pero otros entraron de inmediato en la refriega.
Aunque superados en número, los mormones mantuvieron su frente y expulsaron a sus atacantes, pero no está claro si pudieron votar antes de abandonar Gallatin.
Los rumores entre ambas partes se extendieron y decían que hubo bajas en el conflicto.
Hinkle y Murdock se negaron, citando su derecho como ciudadanos americanos a asentarse donde quisieran.
Boggs, sin embargo, hizo caso omiso de este consejo y continuó esperando a que los acontecimientos se resolvieran.
Doniphan ya había preparado las tropas para evitar enfrentamientos entre mormones y anti-mormones en el Condado de Daviess.
Dunn, actuando bajo las órdenes de Doniphan, continuó hacia Adán-ondi-Ahmán (Rigdon, 41–42, and Documento, p. 24).
Millport, Grindstone Fork y los asentamientos más pequeños de Misuri situados en Splawn's Ridge corrieron una suerte similar.
Se produjo un tiroteo y ambos bandos afirmaron que el otro disparó primero.
Las noticias iniciales exageradas indicaban que casi toda la compañía de Bogart había sido asesinada (Documento, p. 60).
Los generales Atchison, Doniphon y Parks decidieron que necesitaban llamar a la milicia para «prevenir más violencia».
Los hombres de Livingston se imbuyeron en el mismo espíritu y estaban ansiosos por la incursión... sintiendo una extraordinaria simpatía hacia los ultrajes que habían sufrido sus vecinos" (Baugh, p. 115).
Cuando los incursionistas misurianos alcanzaron el asentamiento en la tarde del 30 de octubre, unas 30 0 40 familias mormonas estaban viviendo o acampando allí.
Por desgracia, la tienda tenía grandes agujeros entre los troncos por los cuales los misurianos dispararon y, como un mormón dijo después, se convirtió más en una "carnicería que en un refugio" (Lee, p. 80).
El mayor general Samuel D. Lucas marchó con la milicia estatal hacia Far West y sitió los cuarteles mormones.
Según Hinkle, Smith quería un tratado con los misurianos en cualquier condición excepto ir en batalla (Journal History, p. 13:449).
Otros testigos mormones recordaron que Smith dijo "suplica como un perro por la paz" (Corril, p. 41 and Peck, p. 24).
El coronel Hinkle cabalgó hacia los líderes de la iglesia en Far West y les informó sus propuestas.
Joseph Smith y otros líderes cabalgaron con Hinkle hacia el campamento de la milicia misuriana.
Joseph Smith y los otros líderes arrestados fueron puestos bajo vigilancia durante la noche que pasaron en el campamento del general Lucas, donde se les dejó a merced del clima.
Lucas quería juzgarles con una corte marcial y ordenó al general Alexander William Doniphan que ejecutara a los prisioneros.
Más tarde los líderes de la iglesia fueron entregados a las cortes civiles, donde fueron detenidos sin juicio alguno.
Los vigilantes no anti-mormones también fueron detenidos o juzgados por su parte en la masacre que tuvo lugar en el Molino de Haun.
Finalmente la mayor parte de los mormones se agruparon y fundaron una nueva ciudad en Illinois a la que llamaron Nauvoo.