Muchos delincuentes utilizan guantes para evitar dejar huellas dactilares, lo que dificulta la investigación del crimen.
Los guitarristas también pueden utilizar guantes sin dedos cuando hace demasiado frío para tocar con la mano descubierta.
El diseño habitual consiste en coser la cavidad de la manopla sólo en el dorso del guante sin dedos, lo que permite darle la vuelta (normalmente sujeta por Velcro o un botón) para transformar la prenda de manopla en guante.
No obstante, se ha comprobado que mucho antes que los griegos, los habitantes del Norte, expuestos a los grandes fríos tuvieron la necesidad de proteger sus manos contra los rigores de la nieve, el hielo y los vientos polares.
[4] (Otras traducciones, sin embargo, insisten en que Laertes se puso las mangas largas sobre las manos).
[6] El célebre general e historiador ateniense Jenofonte afirmó que los persas, usaban mitones.
En esa época la tradición y la etiqueta no permitían el uso de guantes en las damas.
Los fabricantes emplearon diversos materiales para confeccionarlos y les dieron curiosas formas.
En su realización se usaron toda clase de pieles y telas, tales como terciopelo, gamuza, conejo, cordero, cabritilla, marta, nutria, perro, lobo, zorro, gato, liebre, ciervo y búfalo.
Entre los hombres, la idea del reto se asociaba siempre al acto de arrojar el guante.
En la Edad Media no se permitía que una persona tuviera sus manos enguantadas en presencia de un superior.
En miniaturas de los siglos XIV y XV, se han podido observar personajes con los guantes en la mano.
Estos guantes comenzaron a usarse antes del siglo XII, y llevaban en el dorso un bordado de oro que representaba una cruz, un cordero pascual, un monograma u otro símbolo relacionado con el culto.
Muchas actividades, tanto en medicina como en industria, requieren el uso obligatorio de guantes.
abrasiones, infecciones) Muchas veces no solo es utilizado para proteger la mano, sino que también es utilizado para proteger el producto (memorias, pantallas, cristales, alimentos, etc) En el caso de un operador industrial, este depende de las manos para realizar su trabajo y esta herramienta es una manera de protegerlas.
Todo esto tiene lógica cuando al mismo tiempo que empezó la industrialización se vio la necesidad de crear y adaptar el producto a esta área en específico, siendo necesaria su implementación junto con otras herramientas posiblemente en un inicio de manera opcional, hoy en día ya obligatorio.
Las propiedades únicas del cuero permiten tanto un ajuste cómodo como un agarre útil para el usuario.
Los delincuentes llevan guantes porque las propiedades táctiles del cuero permiten un buen agarre y destreza.
Dado que el cuero es tan natural como delicado, el usuario debe tomar precauciones para no dañarlos.
Por último, los forros constarán a su vez de tranks, pulgares y fourchettes.
Están diseñados para llevarlos ajustados y no interferir en los movimientos de la mano.