Este río nace en la Meseta Norte, más concretamente en la Fuente del Cubo, Caleruega, Burgos y desemboca en el Duero, en el límite del término municipal de Berlangas de Roa.
([3]) Centrándonos en el río Gromejón a su paso por el tramo que discurre entre Gumiel de Izán, Quintana del Pidio, Revilla y La Aguilera, tenemos que a finales del siglo XII aparece la primera referencia a un molino en las márgenes del mencionado río.
Concretamente, en el año 1190 -fecha en la que Quintana del Pidio cambia de situación jurídica pasando del dominio real al de abadengo, por una permuta entre Alfonso VIII y el abad del monasterio de Silos- en el documento donde se refleja este trueque se mencionan los molinos, suponemos, no cabe otra posibilidad, que se está aludiendo a los molinos en las riberas del Gromejón entre Gumiel de Izán y La Aguilera: “Dono vobis prephatam villam totam, integre, cum collaciis, solaribus populatis et heremis, cum ingressibus et egressibus suis, cum terris, vineis, pratis, pascuis, defesis, et cum rivis, molendinis, aquis, montibus et fontibus, et cum ómnibus directuris, teminis et pertinenciis suis”.
En la documentación del siglo XV volvemos a encontrar referencias concretas a los molinos en la vega del Gromejón a su paso por los términos de Gumiel de Izán, Quintana, Revilla, Gumiel de Mercado y La Aguilera, tramo en el que vamos centrando nuestro estudio molinar.
Pero será en la documentación del siglo XVI donde queda fielmente constatada la existencia de estos molinos.