El ejercicio combinado Gringo-Gaucho es un adiestramiento entre los medios aeronavales de la Armada Argentina y la de los Estados Unidos que se desarrolla desde 1990.
Tiene su origen en la necesidad de los medios aéreos de la Armada Argentina de operar desde portaaviones, como consecuencia del pase a reserva del ARA Veinticinco de Mayo en 1988, permitiendo mantener la buena relación con la marina estadounidense, la profesionalización a través de ejercitaciones aéreas, antibuque y antisubmarinas, y fundamentalmente la recalificación de los pilotos argentinos involucrados.