El nombre se adoptó en honor al Olympia de París, cuando los hermanos iniciaban su incursión en el cine como negocio.
Desde su llegada a Colombia los hermanos Di Doménico realizaban exhibiciones cinematográficas en parques, pequeños locales y algunas calles.
Entre los inversionistas se encontraban Ulpiano Valenzuela, Federico de Castro, Sebastián Carrasquilla, Francisco Rueda, Francisco Pardo (quien fue asimismo) el primer gerente del Gran Salón) y Nemesio Camacho.
El Salón Olympia y las dependencias y solares que lo complementaban, donde después se construyeron escenarios para las película filmadas por la SICLA, ocupaban casi una manzana con frente sobre el costado sur de la calle 25, al sur de la actual avenida El Dorado.
En la actualidad hay en el lugar unas oficinas del banco Colpatria, cuya torre se encuentra en la cuadra adyacente hacia el oriente.