Es un tipo de tarántula muy longevo, habiendo algunas hembras llegado a vivir hasta 30 años en cautiverio.
Los machos, algo menores que las hembras, se alimentan de grillos, saltamontes, cucarachas, lombrices, etc.
Tampoco se consiguen fácilmente en tiendas, por el hecho de que su reproducción en cautiverio no es sencilla.
Se recomienda colocar a las hembras de gran tamaño en terrarios amplios para que puedan moverse con libertad, con un suelo de entre 3 y 5 cm.
Aunque se les puede alimentar con cualquier tipo de insecto doméstico, es preferible adquirir tenebrios, zofobas, grillos o cucarachas en tiendas especializadas.