Son encontrados principalmente en selvas húmedas y montanas, alcanzando su mayor diversidad en los Andes.
Todos los tororoíes son más conocidos por sus cantos simples pero atractivos, generalmente la primera indicación de su presencia.
[12] Con la exclusión del género Pittasoma de Formicariidae, y su inclusión en Conopophagidae,[9] el presente género, junto a Grallaricula, Myrmothera e Hylopezus conforma un clado monofilético bien definido idéntico a la subfamilia Grallarinae anteriormente incluida en Formicariidae.
Según las clasificaciones del Congreso Ornitológico Internacional (IOC)[19] y Clements Checklist/eBird,[8] el género agrupa a las siguientes especies con el respectivo nombre popular de acuerdo con la Sociedad Española de Ornitología (SEO)[10] u otro cuando referenciado:
En contraste, se encontraron diferencias substanciales en las vocalizaciones entre poblaciones geográficamente aisladas o parapátricas.