Gómez IV Suárez de Figueroa y Córdoba

Tan buen político como militar, sus éxitos militares fueron efímeros pero considerados importantísimos en su momento para la Corona española.Hombre mordaz, no fácil de hacer callar, expresaba sus opiniones con brusquedad y rotundidad y tenía un concepto absolutista del poder.[3]​ Tuvo una amplia trayectoria política, pero alejada del centro del poder: embajador extraordinario en Roma (1607) y Francia (1610), virrey de Valencia (1616), gobernador del Milanesado (1618), virrey y capitán general de Cataluña (1629), y nuevamente gobernador de Milán (1630).Miembro del Consejo de Guerra y Estado.Derrotó a los suecos en el sitio de Rheinfelden.
Socorro de la plaza de Constanza , otro cuadro de Vicente Carducho para el Salón de Reinos, en recuerdo del levantamiento del asedio a dicha ciudad que en 1633 consiguió el III Duque de Feria .
En 1633, los tercios españoles comandados por Don Gómez Suárez de Figueroa , III Duque de Feria , tomaron la ciudad suiza de Rheinfelden , dentro del plan de abrir un corredor estratégico de comunicación entre los dominios españoles de Milán y los Países Bajos - según el cuadro de Vicente Carducho para el Salón de Reinos . El Duque de Feria luce la banda roja de general y bastón de mando en la mano izquierda.
Armas del III Duque de Feria