Carecen de cutícula y poseen una epidermis ciliada, como los platelmintos, por lo que al principio se les clasificó en este grupo.
El alimento pasa del bulbo al intestino, que es lineal, simple y ciego.
Desde su extremo posterior hasta la cola del animal existe un cordón celular macizo de función desconocida.
El aparato reproductor femenino de cada individuo posee normalmente un largo ovario dorsal asociado a un receptáculo seminal que en ocasiones puede estar dividido en dos cámaras: la bursa y la prebursa.
Algunos pueden presentar un orificio genital femenino a modo de vagina conocido como gonoporo y situado en la línea medio dorsal del cuerpo.
Una hora después de la fecundación se deposita un único gran huevo que sale al exterior por contracción del cuerpo que produce la rotura de la pared, aunque ésta posteriormente cicatriza.