Georges Pichard
Al principio de los años 60 conoció a Jacques Lob, con el que colaboró en sus siguientes series, Ténébrax y Submerman.Habiendo colaborado con Danie Dubos en la más atrevida Lolly-strip, la cual fue serializada en Le Rire en 1966, Pichard y Lob empezaron a trabajar en historietas eróticas como Blanche Épiphanie (V Magazine, 1968).[2] Hubo una reacción pública significativa ante este personaje que se escapaba de los límites morales de su época y hasta emulaba a Jane Fonda yendo a Vietnam.Al mismo tiempo, Pichard desarrollaba su estilo de mujeres altas y bien dotadas con ojos excesivamente maquillados que les daban una apariencia gótica.[3] Pichard continuó esta línea al crear con Georges Wolinski la polémica serie Paulette para Charlie Mensuel en 1970,[4] que pronto se convirtió en un objetivo de políticos de derecha como Jean Royer y Michel Debre, y con Danie Dubos, Caroline Choléra para L'Écho des savanes en 1975.